DOGVILLE
  DIRECCIÓN Y GUIÓN: Lars Von Trier Coproducción: Dinamarca-Suecia-Francia-Noruega-Holanda-Finlandia-Alemania-Italia-Japón-USA-Reino Unido
 
INTÉRPRETES
:
Nicole Kidman (Grace), Harriet Andersson (Gloria), Lauren Bacall (Ma Ginger), Jean-Marc Barr (El hombre con el sombrero grande), Paul Bettany (Tom Edison)
 
GÉNERO:
¿Drama teatral?
2003


PUNTUACIÓN:
7
   


Por donde empezar a contar algo de esta película. Lo primero sería decir que es anti todo. No está metida dentro del movimiento Dogma, entre otras cosas porque uno de los requisitos es rodar en escenarios naturales y aquí no es que no sea natural, es que no lo hay. Incumple otros cuantos puntos del Dogma 95, pero el espíritu es el mismo. Toda la acción discurre sobre una tarima en la que están pintadas las casas, los árboles, e incluso un perro. Con esa premisa es difícil hacerse a la idea de cómo va a discurrir la historia si no se ve. El director y guionista es el Danés Lars Von Trier, principal animador de esta nueva manera de ver el cine.

Para ayudarnos la cosa empieza con una voz en off que nos cuenta un poco del pueblo y vamos conociéndolo, al igual que sus habitantes. La voz nos dice que las casas están bastante destartaladas, pero sólo vemos a sus moradores sobre unas líneas blancas que limitan el espacio, abriendo y cerrando imaginarias puertas, que pese a no velas oímos y esquivando imaginarios obstáculos. Lo único que hay son algunos muebles, el campanario (con las campanas, aunque no la torre que lo sustenta) y poca cosa más. La calle principal es Elm Street, calle famosa por Freddy Krueger y por John F. Kennedy y en la que no vemos ningún olmo pintado (Elm es olmo en inglés).

A este pueblo llega una mujer llamada Grace huyendo de unos gansters. Todos deciden ayudarla dándole algún trabajo para que pueda quedarse en el pueblo. Pese a sus manos de alabastro y no haber trabajado nunca, se mantiene durante las dos semanas que le dan de plazo haciendo pequeñas cosas y cambiando el modo de vida del pequeño pueblo.

Más que una película es una obra de teatro sobre un gran escenario. Los actores son excelentes. Grace es la omnipresente Nicole Kidman. Entre los habitantes del pueblo y gansters varios están Harriet Andersson, Lauren Bacall, Paul Betanny, Patricia Clarkson, Chloe Sevigny, James Caan.

Todo esto que se inventó Von Trier con el Dogma 95 y ese rollo para mí que es un invento para sacar películas con cuatro duros y creo que el que quiera hacer cosas originales, me parece genial, pero someterse a esas reglas es algo así como lo que decía Groucho Marx de que nunca pertenecería a un club que lo acertara como miembro. Por fortuna parece ser que ya no se harán más películas de ese movimiento. Como digo esta no es una película Dogma, pero se le parece mucho. No sé que presupuesto tendrá, pero viendo los créditos hay mucha gente a la que darle de comer. La película es original, pero de ahí a que sea buena, va un largo trecho. Tiene partes buenas y otras no tanto y la locura de rodar en un escenario es una excentricidad más de un tipo que se lo puede permitir. Lo que sí que hace es aglutinar toda la fuerza de la película en los personajes.

 

J.F.K.
 


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